Lorca
La Fundación Santo Domingo recibe la donación de un despacho de madera tallada perteneciente a D. Francisco Ros Giner
La familia Ros Perán ha donado a la Fundación Santo Domingo un despacho de madera tallada de los años 50 que perteneció a su padre, el ilustre lorquino y mayordomo del Paso Blanco D. Francisco Ros Giner.
El despacho donado cuenta con una mesa, un sillón, cuatro sillas, un armario de tres puertas, con vidriera emplomada en su puerta central, una lámpara, un brasero metálico y un juego de objetos de escritorio acabados en cuero repujado.
Todos los muebles son de madera y fueron tallados por un ebanista local por encargo de D. Francisco Ros Giner a principios de la década de los cincuenta del pasado siglo. Destacan las dos puertas laterales del armario, en las que aparecen talladas las efigies de Gottfried Leibnitz, filósofo y matemático, y del literato español Miguel de Cervantes.
D. Francisco de Asís Ros Perán, D. Simón Ángel Ros Perán, Dª María Concepción Ros Perán y D. José Miguel Ros Perán, así como D. Pablo López Ros y Dª Irene López Ros, en nombre de Dª María Isabel Ros Perán, han querido donar este despacho de madera tallada a la Fundación Santo Domingo en memoria de su padre, D. Francisco Ros Giner, mayordomo del Paso Blanco hasta su fallecimiento en 1994.
Por su parte, la Fundación Santo Domingo, a través de su presidente, Juan Jódar Bardón, ha aceptado agradecida esta donación en presencia de D. Ramón Mateos Padilla, presidente del Paso Blanco, y de Dª María del Carmen Gallego Ramírez, presidenta del Coro de Damas de la Virgen de la Amargura, y de sus juntas directivas.
D. Francisco Ros Giner fue nombrado Hijo Predilecto de la ciudad de Lorca en 1986 gracias a su extensa carrera dedicada al mundo de la enseñanza y a su trabajo por afianzar la cultura en su ciudad. Fue director de dos institutos, inspector y presidente del Círculo Cultural Narciso Yepes, y actualmente uno de los Institutos de Educación Secundaria de la ciudad lleva su nombre.
El mobiliario donado se ha instalado en el despacho de la Fundación Santo Domingo, dotándolo de una gran prestancia y de un enorme valor cultural.
La Fundación, órgano conservador del patrimonio del Paso Blanco y receptor de bienes de los blancos que desean que perduren en la memoria, agradece la donación recibida y se compromete a su conservación en memoria y agradecimiento a una gran Familia Blanca.
