Conecta con nosotros

Desarticulada en Murcia una red líder del control de la venta de productos falsificados en el Levante español

España

Desarticulada en Murcia una red líder del control de la venta de productos falsificados en el Levante español

Agentes de la Policía Nacional han desarticulado en el barrio murciano de San Andrés un entramado criminal que controlaba el almacenaje, distribución y venta al por menor de productos falsificados de alta calidad en el Levante español, según informaron fuentes del citado Cuerpo en un comunicado.

La operación ha tenido lugar tras una investigación desarrollada durante los últimos cuatro meses e impulsada por la Comisaría de Policía Nacional de Elche (Alicante) y que ha contado con la colaboración de la Jefatura Superior de Policía Nacional de Murcia y de la Policía Local de Crevillente (Alicante).

La Policía Nacional inició la operación tras detectar identidad en los patrones de diferentes productos falsificados de alta calidad en las localidades de Elche y Crevillente, principalmente de unas determinadas marcas de prendas deportivas.

Por ello, los agentes intensificaron las gestiones en aras de poder determinar el lugar de venta de los mismos, situando el centro neurálgico de operaciones en el barrio de San Andrés de Murcia, desde donde el entramado criminal investigado controlaba la venta de productos falsificados de alta gama que posteriormente eran vendidos a lo largo de todo el litoral levantino.

LA TAPADERA DEL ENTRAMADO

Los agentes averiguaron que la organización criminal se valía de una tienda abierta al público a modo de tapadera, ubicada en el barrio de San Andrés de Murcia, cercana a la estación de autobuses y que el entramado utilizaba como centro de operaciones, regentada por un varón donde no se vendía ningún producto falsificado.

Los clientes de este comercio ilícito, debían dirigirse obligatoriamente a esta tienda para hacer el contacto inicial. Allí, indicaban al regente del establecimiento los artículos que estaban interesados comprar y, en función de lo solicitado, el tendero llamaba a otro miembro del entramado y le entregaba la llave del «piso-tienda» concreto donde estaba el producto, puesto que cada uno de los pisos estaba dispuesto como tienda específica de un tipo de producto; en uno se vendían sólo zapatillas, en otro prendas deportivas y equipaciones de fútbol, en otro perfumes junto a otros productos, etc.

Como medida de seguridad añadida, las llaves de estos pisos, eran guardadas en prendas de vestir que estaban repartidas por la tienda, tales como; albornoces, batas, chaquetas, con el fin de no ser encontradas ante una posible actuación policial.

PISOS DISTRIBUIDOS COMO TIENDAS Y ALMACENES CON EL STOCK PRECISO

A continuación, llevaban al cliente hasta el «piso-tienda», que estaba perfectamente dispuesto como si fuera una auténtica tienda con maniquíes, estanterías y demás mobiliario distribuido de forma exactamente igual que si se tratase de una tienda abierta al público.

Estos pisos, ubicados en la misma calle y a escasos metros de la tienda tapadera, eran controlados por «guardadores», esto es, miembros del entramado criminal que a cambio de una pequeña contraprestación económica vivían dentro del piso para «guardar» la ropa falsificada, y evitar que otros entramados criminales les robasen la ropa, como si de droga se tratara.

Por otro lado, la organización contaba con otros cuatro almacenes, también de localización cercana donde, en el caso de que el stock de los pisos-tienda se acabasen, la organización tenía cantidad suficiente de productos almacenados para seguir abasteciéndolos continuamente, de modo que estos almacenes, donde los productos eran almacenados en bruto en cajas, eran la antesala de la venta directa de esta ropa en las tiendas.

LA CLAVE DEL EXITOSO COMERCIO ILÍCITO

Como puntos fuertes que conferían éxito a este ilícito negocio, estaban, por un lado, la amplia oferta de productos falsificados que vendían (desde prendas de marcas de lujo, a relojes de alta gama, equipaciones de multitud de equipos de fútbol, alta perfumería, abrigos, etc.), y por otro, el idóneo enclave logístico buscado por la organización tanto para la ubicación de la tienda tapadera en las cercanías de la estación de autobuses de Murcia, como para el resto de inmuebles utilizados para el ilícito fin.

Cabe mencionar que uno de los principales obstáculos con los que se enfrentaron los agentes durante la fase de investigación, fue evitar las extremas medidas de seguridad adoptadas por la organización, quienes se valían de personas comúnmente denominadas «aguadores» apostados en las esquinas de las calles que ante el más mínimo movimiento policial alertaban al principal responsable.

Así las cosas, tras la compleja investigación, se diseñó un amplio operativo policial que contó con la participación de más de 50 agentes policiales para la práctica de las 10 entradas y registros que se llevaron a cabo de forma simultánea en distintos inmuebles ubicados en el barrio de San Andrés de Murcia, fruto de lo cual se consiguió detener a los tres principales miembros del entramado.

El cómputo global de productos falsificados incautados a lo largo de los registros practicados, a la espera de un recuento más minucioso y un peritaje oficial, se estima que su valor puede ser superior a los 10.000.000 euros.

Entre estos artículos, se ha contabilizado a grosso modo; unas 15.000 equipaciones de fútbol, 30.000 sudaderas, 1.000 perfumes, 5.000 pantalones vaqueros, 10.000 pares de calzoncillos, 10.000 prendas entre abrigos y chaquetas de marcas de alto valor económico, 2.000 pares de zapatillas, entre otros muchos tipos de efectos, todo ello de prestigiosas marcas de elevado valor económico.

La operación policial, impulsada por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la Comisaría de Elche, ha contado con la colaboración del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional de la Jefatura de Murcia y de la Policía Local de la localidad alicantina de Crevillente.

Los detenidos, de entre 39 y 56 años de edad, de nacionalidad marroquí, a quienes se les imputó un delito contra la propiedad industrial y otro de pertenencia a grupo criminal, fueron puestos en libertad tras ser oídos en declaración en dependencias policiales, quedando a la espera de comparecer en sede judicial.

Redacción de Periódico EL LORQUINO Noticias.

Más de España

To Top