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El Debate Regional explota por los aires tras María Marín negarse a abandonar el plató

Región de Murcia

El Debate Regional explota por los aires tras María Marín negarse a abandonar el plató

La noche en Molina de Segura se caracterizó por el frío y la humedad, pero el ambiente se caldeó debido a un debate que resultó mucho más tenso de lo esperado. La candidata de Podemos a la presidencia de la Comunidad, María Marín, fue la responsable de dinamitar la situación al negarse a abandonar el plató para dar paso a Más Región. Esta negativa provocó la suspensión del debate, dejando dos bloques sin tratar entre los candidatos a la presidencia de la Comunidad de los partidos políticos representados en la Asamblea Regional.

El debate fue organizado por el Colegio de Periodistas de la Región y se llevó a cabo en las instalaciones de la televisión autonómica, La 7. Mientras que en el exterior la atmósfera era gélida, en el interior de los estudios se respiraba un ambiente tenso. Cerca de las ocho de la noche, dos horas antes del inicio del programa, se esperaba una decisión sobre el recurso presentado por Podemos-IU-Alianza Verde, el cual cuestionaba la obligación de compartir el tiempo de intervención con Más Región impuesta por la Junta Provincial.

Más Región reclamaba su participación en el debate debido a que se presentaron en coalición con Equo, un partido que en las elecciones autonómicas de 2019 se alió con Podemos y obtuvo dos representantes en la Asamblea Regional. Consideraban que tenían derecho a estar presentes en el debate. Sin embargo, el recurso presentado por Podemos no obtuvo resolución antes del inicio del debate, por lo que se decidió aplicar lo dictado por la Junta Electoral Provincial, según explicó Mariano Caballero, director de Radiotelevisión de la Región de Murcia (RTRM).

En un principio, se esperaba la participación de seis candidatos en el debate, incluyendo a Helena Vidal, cabeza de lista de la coalición verde, como invitada de última hora. Caballero adelantó que María Marín de Podemos sería reemplazada por la representante de Más Región durante la mitad del tercer bloque. Marín tendría treinta segundos para dirigirse a los ciudadanos, pedir el voto y luego abandonar el plató.

Sin embargo, la realidad fue diferente. Cuando finalizó la primera parte del tercer bloque y habían transcurrido más de una hora y cuarto desde el inicio del debate, María Marín hizo una advertencia: «Para irme, tendréis que echarme». Ante esta situación, los moderadores, el presentador de La 7 Luis Alcázar y la periodista de Onda Regional Sonia Illán, anunciaron un corte publicitario y, después de una espera de casi media hora, se decidió suspender el debate. Miles de espectadores aguardaban el reinicio del programa.

En ese lapso de tiempo, se produjo una intensa discusión en el exterior del plató entre el equipo de campaña de Podemos y Antonio Peñarrubia, director general de La 7, y Mariano Caballero. Estos últimos defendían que Marín debía abandonar su atril y ceder su lugar a la candidata de Más Región, Helena Vidal, según lo decidido por la Junta Electoral. Peñarrubia afirmó: «Es la ley y yo no voy a incumplirla», a lo que Víctor Egío, secretario de comunicación de Podemos, respondió: «Podíais haber aplazado el debate y no lo habéis hecho, pero ya sabemos cómo funciona esto».

Hasta ese momento, el bloque más polémico del debate había sido el relacionado con las políticas medioambientales. Manuel Buitrago, jefe de Local del periódico LA VERDAD, introdujo el tema con la pregunta: «¿Eliminarían, cambiarían o endurecerían la ley de protección del Mar Menor?». La candidata de Ciudadanos, María José Ros, mostró una portada de LA VERDAD con un titular alarmante sobre el Mar Menor de 1983. Ros afirmó que era necesario fortalecer la ley para evitar que los partidos PP y Vox la deroguen.

En este tema, tanto el candidato del PP, Fernando López Miras, como el del PSOE, José Vélez, expresaron sus diferencias sobre las medidas a adoptar. López Miras negó la realidad y acusó al Gobierno del PSOE de no tomar medidas concretas para proteger el Mar Menor. Vélez respondió que era una obligación moral y política salvar el Mar Menor y que se debía ser serio e invertir en su protección. Sin embargo, todos estos debates quedaron en segundo plano cuando Marín decidió mantenerse aferrada a su atril.

Redacción de Periódico EL LORQUINO Noticias.

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