Salud prorroga una semana más la fase 1 flexibilizada en Jumilla, Lorca y Totana

La Consejería de Salud ha prorrogado una semana más la fase 1 flexibilizada en Lorca, Totana y Jumilla, aunque en este último municipio la situación está «en vías de control» y se permitirá la ocupación máxima del 40% en el interior de establecimientos de hostelería y restauración dada su buena evolución.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, el consejero de Salud, Manuel Villegas, ha reconocido que Jumilla ha mejorado «ostensiblemente» su tasa de incidencia desde su paso a la fase 1 flexibilizada, pasando de 922 casos por cada 100.000 habitantes a 398 actualmente. Así, ha señalado que la situación está «en vías de control» aunque las cifras actuales «nos aconsejan mantener la fase 1 una semana más».

No obstante, gracias a esa mejoría, la Consejería permitirá la ocupación máxima del 40% en el interior de establecimientos de hostelería y restauración.

En lo que respecta a Lorca, ha recordado que todas las previsiones apuntaban a la salida de la fase 1 esta semana, «todo gracias al ejemplar comportamiento de la sociedad lorquina, que ha permitido rebajar de forma extraordinaria la tasa de incidencia en la ciudad».

Sin embargo, el brote detectado en el Hospital privado Virgen del Alcázar «ha hecho que necesitemos unos días más para controlarlo y estabilizarlo». Así, está previsto que la semana que viene disminuyan las restricciones «si todo sigue igual», ha avanzado.

En lo que respecta a Totana, ha anunciado que seguirá una semana más en la fase actual para analizar la efectividad de las medidas acordadas, aunque la situación «también empieza a mejorar, según las cifras publicadas últimamente».

Ha recordado que en la reunión del Consejo Interterritorial celebrada este miércoles por la tarde se analizaron los datos de la pandemia a nivel nacional y europeo. «Una situación que sigue siendo preocupante en los dos ámbitos y, además, hay mucha similitud en esta segunda hora», según el consejero. En este Consejo se hizo un llamamiento a «no bajar la guardia» y a «estar expectantes a la evolución cambiante de la situación epidemiológica en cada territorio».