El primer museo de la Prehistoria

Nos remontamos a la mitad del siglo XIX, cuando un romántico y joven funcionario de Aduanas llamado Jacques Boucher de Perthes (1788-1868) funda un pequeño museo en el año 1844. Ese pequeño museo sería reconocido más adelante como el primer edificio que albergó piezas prehistóricas.

El joven Jacques fundó en Abbeville la «Sociéte d´émulation» y se dispusó a excavar , en seguimiento de su curiosidad científica, las terrazas del río Somme, encontrando numerosas evidencias de los hombres preshistóricos. Las piezas halladas fueron expuestas en ese ya mencionado primer museo de la Prehistoria.

Así Francia se coronaba como la cuna de nacimiento de la ciencia prehistórica. Antes de Boucher de Perthes, ya hubo interés por conocer el origen del hombre como especie durante el Siglo de las Luces (siglo XVIII). incluso antes de este, ya en la antiguedad más remota, autores latinos y griegos planteaban en sus obras la inquietud por conocer el pasado más remoto de la humanidad.

El ser humano empezaba por fin a tener una conciencia temporal de su origen como especie dentro del reino animal. En 1846 Boucher de Perthes publica la obra Antigüedades célticas y antediluvianas, muy impregnada por las corrientes nacionalistas de la época, pero apuntándose el tanto de ser la primera obra en crear una imagen del hombre prehistórico, obra esta que pasó desapercibida en la Academia de las Ciencias de París. 

Años después diferentes comisiones confirmaron los hallazgos realizados en Abeville por el «Padre de la Prehistoria» , Jacques Boucher de Perthes, y el primer Museo de la Prehistoria.

Imagen: El museo Boucher-de-Perthes d’Abbeville en la actualidad.

Redacción: Andrés Alejandro García Caro. Periódico El Lorquino.