La Comunidad apoya a las víctimas de Indonesia con una ayuda de 20.000 euros

Está destinada a garantizar el agua potable y condiciones de saneamiento seguras a los supervivientes del terremoto y tsunami del pasado mes de septiembre, que causó más de 2.200 muertes

La Comunidad Autónoma contribuye con 20.000 euros a garantizar el agua potable y condiciones de saneamiento seguras y adecuadas a las personas damnificadas por el terremoto y tsunami que tuvo lugar en Indonesia el pasado mes de septiembre, y que arrojó la cifra de 2.256 fallecidos, 10.679 heridos y más de 70.000 evacuados o desplazados.

La subvención concedida a Unicef, sobre la que informó hoy el consejero de Presidencia, Pedro Rivera, a la presidenta de este organismo en la Región de Murcia, Amparo Marzal, tiene por objeto la provisión, suministro y mantenimiento de agua potable y de agua para usos domésticos, así como la provisión, distribución y mantenimiento de suministros para la gestión de residuos y saneamiento.

La ayuda fue autorizada previo el acuerdo adoptado en la reunión celebrada el pasado mes de noviembre por el Consejo Regional de Cooperación Internacional para el Desarrollo en el sentido de destinar 20.000 euros para atender a los damnificados por los sismos que tuvieron lugar en la isla indonesia de Célebes, canalizando la financiación a través de una Organización No Gubernamental para el Desarrollo (ONGD) que operase sobre el terreno, como es el caso de Unicef, que intervino desde el primer momento tras la catástrofe.

Rivera destacó que Murcia «es una región solidaria, que apoya proyectos de ayuda humanitaria donde más se necesita» y expresó la «solidaridad del Gobierno regional con el pueblo indonesio, nuevamente golpeado por una tragedia debido a la erupción del Anak Krakatoa y el consiguiente maremoto en vísperas de la Nochebuena».

El consejero de Presidencia señaló que «para apoyar las situaciones derivadas de catástrofes o emergencias, la Comunidad destinó en 2018 un presupuesto de 70.000 euros. De esa cantidad, 50.000 euros fueron al fondo de ayuda que compartimos con la Agencia Española para la Cooperación Internacional al Desarrollo y otras diez comunidades autónomas; y los otros 20.000 euros forman parte de una línea específica de ayuda directa a ONGD implantadas en la Región, para apoyar la acción humanitaria, que en esta oportunidad se han destinado a la inmensa tragedia que afligió a las isla Célebes el pasado mes de septiembre».