¿Cómo es ser bimadre? ¿Qué supone traer dos bebés al mundo?

Los embarazos de gemelos o mellizos tienen un condicionante especial. Solo unos pocos de cada mil embarazos acaban en partos múltiples, y la mayoría de ellos son de mellizos, que derivan de fecundaciones simultáneas pero independientes, es decir, ocurren cuando dos espermatozoides fecundan al mismo tiempo dos óvulos diferentes.

En algunas familias, el nacimiento de mellizos es algo especialmente frecuente, por lo que se sospecha que existe cierta predisposición genética, especialmente en la carga hereditaria femenina.

En los últimos años, sin embargo, ha aumentado la cifra de embarazos múltiples a causa de los tratamientos hormonales para provocar embarazos, que con frecuenta provocan el desarrollo de varios óvulos. En los tratamientos de reproducción asistida se suelen implantar a la mujer varios óvulos fecundados a la vez.

Otro motivo que explica el incremento de los embarazos múltiples es la edad cada vez mayor en que las mujeres se plantean ser madres. A más edad, mayor concentración de hormona TSH, que determina una mayor probabilidad de que varios óvulos puedan ser fecundados.

Si ya un pequeño supone todo un ajetreo para la madre, especialmente si es primeriza, el trabajo se multiplica al ser dos bebés. Un bebé viene con un pan debajo del brazo, dos, con el doble, pero a más pan, más trabajo.

De un solo parto, dos bebés

La probabilidad de experimentar un embarazo múltiple es una cuestión azarosa que puede verse determinada por cuestiones genéticas, por la edad o por someterse a tratamientos de fertilidad. No obstante, el azar siempre juega un papel fundamental. Las madres que experimentan una situación de este tipo parten una ventaja si quieren formar una familia con más miembros, de un solo parto ya dan a luz a dos bebés.

El cuerpo de la mujer se somete a mucho estrés cuando vive un embarazo, de modo que los habituales achaques se viven solo una vez en caso de un parto múltiple. Un segundo aspecto positivo, aunque este no tiene especial importancia en España, donde los embarazos y los partos están cubiertos por la Seguridad Social es que, si optas por pagar un hospital, es menos costos tener un parto que dos.

Una reincorporación al mercado laboral menos tardía

España, a pesar de los avances en reducción de brecha salarial y acceso de la mujer al mercado laboral, sigue siendo un país en el que muchas mujeres se ven obligadas a abandonar durante un tiempo su carrera profesional por el simple hecho de ser madres.

Con un embarazo múltiple no hay que pensar en pedir permisos de maternidad más de una vez, ya que en ocasiones suele ser un calvario burocrático. Con respecto a esta idea, el gobierno español ha ido introduciendo mejoras en el permiso de paternidad, pasando en 2019 de cinco a ocho semanas.

Durante los años 2020 y 2021, el permiso irá aumentando hasta las 12 semanas en 2020 y las 16 en 2021 para igualar los permisos de maternidad y paternidad.

Esta noticia, para madres y padres de gemelos o mellizos es siempre bienvenida, porque dos pequeños suponen mucha más carga de trabajo que uno solo.

Compartir habitación y compartir ropa

Una mamá con un hijo pequeño que vuelve a quedarse embarazada  puede sufrir los celos del hijo mayor cuando llegue el nuevo bebé. Aunque al final acabarán entendiéndose y queriendo, tener dos bebés de una vez supone no tener que vivir esa situación.

La unión de dos mellizos o dos gemelos es siempre más intensa que la de dos hermanos de diferente edad. Como los pequeños están tan unidos, no querrán estar separados. Van a compartir encantados la habitación, y hasta la ropa.

En los primeros meses la ropa bebe es un gasto importante, pero con dos en casa no siempre supone tener que comprar más cantidad de ropa, sino aprovecharla de mejor modo. En este sentido, dyley.com aconseja acudir al comercio electrónico, donde es más frecuente encontrar prendas a precios más económicos.

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La ropa, además de la habitación, no es lo único que compartirán los pequeños. Al tener la misma edad, comparten desde el vientre hasta sus juguetes, risas, tristezas y desaciertos. Para una madre, los besos, los abrazos, las sonrisas… son dobles.

La atención que hay que prestarles a dos pequeños requiere más tiempo y cuidados, pero la recompensa es doble. Los primeros días y semanas son los más difíciles para padres de mellizos o gemelos, pues hay que habituarse a alimentar frecuentemente a los bebés, la falta de sueño y la falta de tiempo de los propios padres. En estos casos, la ayuda de los familiares es más bienvenida que nunca.