Región de Murcia
Un brote en el Hospital del Rosell de Cartagena deja 9 pacientes y 4 sanitarios contagiados
El Hospital Santa María del Rosell de Cartagena ha registrado un brote de coronavirus en su Unidad de Cuidados Paliativos con nueve pacientes y cuatro sanitarios contagiados, según ha informado la dirección del centro en un comunicado.
En este sentido, la Gerencia del área II de salud de Cartagena quiere transmitir «tranquilidad», ya que desde su detección «se ha actuado de manera rápida y coordinada».
Las actuaciones contempladas en el Plan de contingencia del complejo hospitalario habían recomendado ya la reorganización de los pacientes de la Unidad de Cuidados Paliativos en la cuarta planta del recinto, lo que permite el aislamiento de esa planta con respeto al resto del recinto y todas las acciones que se han emprendido desde el primer momento están dirigidas por el servicio de Medicina Preventiva (pacientes) y el servicio de Prevención y Riesgos Laborales (profesionales).
El gerente del Rosell, José Carlos López Lacoma, ha indicado que, ante la incidencia que se ha producido este fin de semana con un «pequeño brote» epidémico de COVID-19 en el hospital, «nos sentimos responsables el equipo directivo de transmitir una información fiable y transparente sobre cómo está transcurriendo». Asimismo, ha transmitido la «tranquilidad» sobre cómo se está llevando a cabo la intervención de esta situación.
Ha reconnocido que los pacientes afectados han sido «extremadamente sensibles, sobre todo de cuidados palativos». Ha recordado que el hospital ya contempló en octubre que, en base al plan de contingencia, este tipo de pacientes se iban a trasladar a una unidad en un plano superior para «aislarlos de posibles plantas con pacientes COVID».
«Es decir, estos pacientes estaban ubicados en un nivel fuera del riesgo de contagio de otras unidades que tenemos en plantas inferiores, como la ‘segunda b’, que es de planta COVID», según López, quien ha advertido que, independientemente, el riesgo de contagio «es elevado en todos los sentidos».
A este respecto, ha señalado que esta incidencia se ha desarrollado, precisamente, en la planta ‘cuarta derecha’, que contaba con 12 pacientes hospitalizados en ese momento, seis de ellos pacientes apliativos ye l resto en fase de recuperación funcional. De todos ellos, el viernes a mediodía se identificó por sintomatología que tres de ellos podrían ser sospechosos.
Se les hizo la PCR y se confirmó el diagnóstico de COVID. La primera iniciativa, según López, fue reubicarlos en una unidad COVID del Hospital Santa Lucía por el cuadro sintomatológico que reunían, poniendo en marcha el protocolo del servicio de prevención de riesgos laborales y del servicio de medicina preventiva.
De la mano de estos servicios se desplegó la intervención en el hospital y, a nivel de pacientes, se aumentó el cribado y se detectaron hasta seis pacientes más por la tarde-noche del viernes en cuidados paliativos. En función de la sintomatología, quedaron ingresados en la unidad COVID de El Rosell y en la unidad COVID del Santa Lucía.
Por otra parte, también se aumentó el cribado entre los trabajadores, cuatro de los cuales han dado positivo, tres auxiliares de enfermería y una enfermería, según López.
Para un mejor manejo del brote se han realizado más de 50 PCR a trabajadores y se han obtenido ya 43 negativos posteriores, y solamente hay 12 pendientes por hacer. «Es un buen síntoma de tranquilidad el hecho de que ya es un número importante de determinaciones que están dando negativas y en las que seguimos trabajando», según López.
Igualmente se están realizando también pruebas a todos los pacientes hospitalizados, sin que se hayan dado nuevos positivos en ambos ámbitos desde el viernes. Todo ello permite avanzar una evolución positiva de la situación y que se haya podido delimitar el brote
López ha aclarado que, en un principio, dada la incertidumbre por la evolución del brote y la envergadura que podía tener, se invitó a los acompañantes mientras no se tuviera bajo control la situación . Una vez que se conoce el impacto del brote, se retoma el acompañamiento a los pacientes del hospital.
En concreto, los pacientes de cuidados paliativos tendrán us acompañante porque «son extremadamente sensibles», y también se permitirá en los pacientes que tengan una necesidad funcional de apoyo familiar.