España
Detienen a un ganadero en Zaragoza por explotar a cinco inmigrantes
Fuente: EUROPA PRESS
Agentes de Policía Nacional han detenido a un varón, de 50 años, propietario y gerente de una empresa del sector ganadero, ubicada en Ejea de los Caballeros (Zaragoza), como presunto autor de un delito contra los derechos de los trabajadores, por explotar a cinco inmigrantes.
El arresto tuvo lugar el pasado 20 de octubre y le ha sido incoado, además, un expediente sancionador por parte de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social (ITSS) por sus incumplimientos en materia de extranjería, salario, jornada, vacaciones, horas extras, seguridad y salud laboral, ha señalado la Jefatura Superior de Policía de Aragón en una nota de prensa.
La Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras, en colaboración con la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Zaragoza, procedió en septiembre a la inspección de una granja ganadera, sita en la capital de la comarca de las Cinco Villas.
Allí comprobaron que había cinco empleados en situación irregular en España, que ejercían labores de manejo de máquinas, así como alimentación, medicación y cuidado de los animales, en condiciones que infringían sus derechos laborales básicos, sin contrato, sin formación, sin el descanso preceptivo y sin una adecuada prevención de riesgos laborales, ni medidas anticovid, entre otras infracciones.
Por ello, los funcionarios de la Unidad Central de Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF) de Zaragoza procedieron a la detención del empresario, al que se le investiga por un delito contra los derechos de los trabajadores.
El empresario les ofrecía trabajo a sabiendas de su situación de irregularidad y los extranjeros, carentes de recursos y con un gran desconocimiento de la legislación vigente, tenían que aceptar por la situación de vulnerabilidad que sufrían en España.
JORNADAS DE DIEZ HORAS
Tal y como se ha recogido en las diligencias policiales practicadas y según el testimonio de estas cinco víctimas, los trabajadores hacían jornadas laborales de diez horas, con 15 minutos de descanso, seis días a la semana.
Asimismo, sin haber recibido ningún tipo de formación, se encargaban de funciones tales como el manejo de máquinas, así como alimentación, medicación y cuidado de los animales. Estas tareas las realizaban desprovistos de equipos de protección individual –mascarillas, guantes, gel hidroalcohólico–, siendo los mismos trabajadores, que no estaban vacunados contra la COVID-19, los que tenían que comprar su material.
ACCIDENTES
Por sus condiciones de trabajo, carentes de prevención de riesgos laborales, dos de ellos sufrieron lesiones en los dedos de las manos, en concreto unos hongos a consecuencia de la manipulación de los químicos que echaban en la comida y a los medicamentos que administraban a los animales, teniendo que acudir a una farmacia para comprarse con su dinero unas cremas e iniciar un tratamiento.
A otro trabajador se le cayó una lámina de la bodega de la granja, provocándole un gran corte en la mano izquierda, quedándole una cicatriz. Ninguno de ellos acudió a ningún centro sanitario para atendido, ya que tenían miedo por su situación de irregularidad en el país y porque el empresario, al inicio de su relación, les insistió en que si tenían algún accidente o contingencia laboral e iban a ser asistidos por facultativos sanitarios, no debían decir que trabajaban ilegalmente y omitir que se habían lesionado en el trabajo.
SIN VACACIONES
Uno de ellos empezó a trabajar hace quince días, si bien los otros cuatro llevaban más de un año en la granja y no habían disfrutado de días de vacaciones; solamente uno consiguió diez días de descanso a pesar de que había solicitado un mayor permiso al empresario.
La situación de necesidad de estos trabajadores les llevó a aceptar condiciones inferiores a las reconocidas legalmente, sin formalización de contrato laboral alguno, privándoles no sólo de las retribuciones establecidas por disposiciones legales y convenios colectivos, sino de futuras prestaciones sociales, sin pagas extras y recibiendo del empresario el dinero en metálico en un sobre a final de cada mes.
Todo lo actuado fue remitido al Juzgado de Instrucción competente de Ejea de los Caballeros, quedando el detenido en libertad tras prestar declaración, con la obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando fuera requerido.
LUCHA CONTRA LA EXPLOTACIÓN
El Dispositivo efectuado se enmarcó dentro del ‘Convenio de colaboración para la prevención del empleo irregular y el fraude a la Seguridad Social suscrito entre el Ministerio del Interior y el Ministerio de Empleo y Seguridad Social’ firmado el 30 de abril de 2013.
Estas actuaciones se incardinan en la lucha contra la explotación laboral y la trata de seres humanos en Aragón, siendo los sectores más afectados el ámbito doméstico, la agricultura, la ganadería y la hostelería.
La Policía Nacional ha recordado que dispone de una línea 24 horas para denunciar estos hechos anónimamente, vía telefónica en el 900 10 50 90 y en la web ‘[email protected]’, como medio para facilitar la colaboración ciudadana y dar una eficaz respuesta policial a las demandas de particulares y de los colectivos sociales.