Historia y patrimonio
La antigua cárcel de Lorca se convertirá en la sede de la Escuela Oficial de Idiomas
La antigua cárcel de Lorca, un edificio del siglo XVII ubicado en el casco histórico de la ciudad, será la nueva sede de la Escuela Oficial de Idiomas (EOI). Así lo ha anunciado el alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, tras reunirse con la dirección del centro educativo. La noticia fue conocida ayer domingo en exclusiva en el diario regional La Verdad. El pasado mes de junio desde este El Lorquino también avanzábamos que el edifico tendría un uso cultural y educativo.
Las obras de rehabilitación del edificio comenzarán en el primer trimestre de 2025 y estarán financiadas con fondos europeos. La EOI, que actualmente cuenta con 700 alumnos, ocupará la planta baja del inmueble, donde se habilitarán diez aulas, cuatro departamentos y una sala multiusos.
El proyecto de rehabilitación integral del edificio también incluye la renaturalización de los depósitos de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla en Santa María y actuaciones de rehabilitación energética en viviendas sociales de la zona.
Un revulsivo para el casco histórico
El alcalde ha destacado que la ubicación de la EOI en la antigua cárcel supondrá un «revulsivo» para el casco histórico, ya que el constante trasiego de alumnos dará vida a la zona durante toda la jornada. Además, la escuela podrá ofertar cursos de idiomas también en horario de mañana, algo que no era posible en su actual ubicación.
Un espacio abierto a la ciudadanía
La antigua cárcel, que cuenta con una única entrada, «está cerrada a la ciudadanía», según el arquitecto municipal Enrique Berruezo. El objetivo de la rehabilitación es revertir esta situación y abrir el edificio a la ciudad.
Una de las propuestas es crear un auditorio al aire libre con un gran jardín vertical y servicio de cafetería en el patio del edificio. También se habilitarán una sala de estudio de 24 horas y salas de exposiciones.
Un reto de accesibilidad
La mejora de la accesibilidad será uno de los principales retos de la rehabilitación. El edificio, de tres plantas y 4.000 metros cuadrados de superficie, tiene numerosos desniveles que se resolverán con la colocación de pavimento acristalado bajo el que habrá zonas ajardinadas.
Un edificio con historia
La antigua cárcel fue construida en el siglo XVII y ha sido utilizada como prisión hasta hace relativamente poco tiempo.En 2020 se realizaron obras de consolidación de la estructura y se descubrieron varios tesoros ocultos, como un paño de 17 metros lineales de la muralla andalusí del siglo XI.