Internacional
Vieron que tenían un oso cuando su perro empezó a andar a dos patas
A medida que iban pasando los meses, sus dueños se iban sorprendiendo con el comportamiento del cachorro. Su pequeña mascota, crecía demasiado rápido e ingería demasiado. «Una caja de frutas y dos cubos de fideos todos los días”, comentaba Su Yun, la dueña del animal.
Aunque estas cosas les hacían sospechar, no encontraron la explicación hasta que su perro empezó a caminar a dos patas y ya pesaba 113 kilos. Sus sospechas se confirmaron. No habían comprado un perro, en realidad habían comprado una cría de oso negro asiático. «Cuanto más crecía, más parecía un oso. Y tengo un poco de miedo de los osos», decía Su Yun, según recogen medios como The Independent.
La familia avisó a las autoridades y finalmente, el Centro de Rescate de Animales Salvajes de Yunnan se ha hecho cargo del oso.
El animal, que ya cuenta con dos años, tuvo que ser sedado para ser trasladado al centro porque su gran tamaño intimidaba hasta al personal especializado.
El oso ha sido identificado como un oso negro asiático, una especie en peligro de extinción que alcanzaría los miles de euros de venderse en el mercado negro.