Internacional
Aumentan a 127 los muertos y más de 700 heridos por el terremoto en China
Las provincias chinas de Gansu y Qinghai, en el noroeste del país, se encuentran en estado de emergencia después de que un devastador terremoto de magnitud 6,2 sacudiera la región la noche pasada. Equipos de rescate trabajan sin descanso en medio de una gélida ola de frío, con temperaturas descendiendo hasta los -14 grados centígrados, en una carrera contra el tiempo para encontrar supervivientes.
La catástrofe ha dejado un saldo desgarrador de al menos 127 personas fallecidas, 734 heridos y al menos 20 personas desaparecidas, según informes de la prensa oficial. Las bajas temperaturas y las complicaciones para acceder a las zonas montañosas afectadas han generado preocupación entre los equipos de rescate, que utilizan drones, excavadoras y topadoras para buscar a los desaparecidos.
La agencia estatal Xinhua advierte que las bajas temperaturas podrían acortar el período crítico de 72 horas tras un terremoto, cuando las posibilidades de rescate son mayores, aumentando el riesgo para las víctimas atrapadas.
El gobierno chino y el Ministerio de Gestión de Emergencias han declarado una respuesta de nivel II al desastre, centrándose en las áreas más afectadas, como el condado de Jishisan en Gansu y la ciudad de Haidong en Qinghai. Más de 2,000 bomberos y fuerzas armadas se han desplegado en operaciones de rescate y alivio, con un financiamiento de 200 millones de yuanes (alrededor de 28 millones de dólares, 25 millones de euros).
El presidente chino, Xi Jinping, instó a las autoridades locales a realizar «todos los esfuerzos posibles» para tratar a los heridos, reparar la infraestructura y reasentar a los afectados. Se señala que la escasa resistencia sísmica de los edificios en la región ha contribuido significativamente a la alta cifra de víctimas, especialmente considerando el momento del terremoto durante la noche, dejando a muchas personas sin tiempo para evacuar.
Las redes sociales chinas han compartido impactantes vídeos y fotografías de bomberos trabajando arduamente para rescatar a residentes atrapados bajo escombros y de afectados resguardándose entre edredones en las carreteras.
En respuesta a la emergencia, las autoridades han enviado suministros, incluyendo 2,600 tiendas de campaña, 10,400 camas plegables, 10,400 edredones y 1,000 juegos de estufas, para cubrir las necesidades básicas de las personas afectadas. A pesar de estos esfuerzos, la magnitud de la tragedia subraya la vulnerabilidad de la región frente a desastres naturales.
