Gobierno regional informa que la tasa de paro femenino cae tres puntos en un año

Actualmente, la proporción de mujeres desempleadas sobre el total de activas es del 16,62 por ciento en la Región de Murcia, mientras que esa cifra llegó a superar el 30 por ciento durante la crisis

También se ha recortado en casi dos puntos la distancia entre las tasas masculina y femenina

La tasa de paro femenino en la Región de Murcia ha descendido 3,11 puntos con respecto a la que se registraba doce meses atrás, y se ha situado en su mínimo desde hace más de once años. En concreto, la proporción de mujeres desempleadas (53.000) sobre el total de la población activa de este sexo (319.000 mujeres) ha pasado del 19,73 por ciento que se registraba un año atrás al actual 16,62 por ciento, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) a la conclusión del tercer trimestre de 2019.

Se trata del mejor dato desde el cuarto trimestre de 2008, cuando el registro era del 14,61 por ciento. A partir de ese punto, la crisis económica y de empleo provocaría que la tasa llegase a superar el 30 por ciento en diversos tramos, como sucedió a la conclusión del tercer trimestre de 2014 (30,32 por ciento) o tras el segundo trimestre de 2015 (30,53 por ciento).

Ese ‘techo’ del desempleo femenino supuso un punto de inflexión, ya que desde entonces se inició una tendencia de descenso continuado que ha llevado a una reducción acumulada de 13,91 puntos. Si entonces la cifra de mujeres en paro estimada por la Encuesta de Población Activa era de 94.500, a día de hoy son 53.000, es decir, 41.500 menos.

La actual tasa del 16,62 por ciento sitúa a la Región a siete décimas de converger con el dato medio nacional de mujeres en paro, que es del 15,92 por ciento. Esa distancia se ha recortado significativamente con respecto a los 3,51 puntos de diferencia que se contabilizaban hace un año (16,22 por ciento de tasa de paro femenino en España y 19,73 por ciento en la Región).

Asimismo, y con respecto a doce meses atrás, también se ha recortado casi dos puntos la distancia entre la tasa de paro masculina y la femenina en la Región. Si hace un año esa diferencia era de 6,10 puntos en beneficio de los hombres, actualmente es de 4,42 puntos. La tasa de desempleo masculina es hoy del 12,2 por ciento.

El consejero de Empleo, Investigación y Universidades, Miguel Motas, valoró como “muy positivos estos datos” y señaló que “la participación en igualdad de las mujeres en el trabajo continúa siendo una política clave en las sociedades avanzadas que, además, beneficia e impulsa el desarrollo socioeconómico de un territorio”.

13.200 nuevas ocupadas en un año y más empleo estable

Por lo que se refiere a los datos de creación de empleo, el INE refleja que la Región cuenta a día en la actualidad con 266.000 mujeres ocupadas, lo que supone que hoy trabajan 13.200 mujeres más que hace un año (un 5,22 por ciento más). Este aumento del empleo femenino en 2019 ha sido superior al masculino, que creció un 2,86 por ciento.

Además, también se produjo un repunte de la contratación estable en este colectivo. Así, a lo largo del año pasado se firmaron 37.777 contratos indefinidos a mujeres, lo que supone 2.469 más que en 2018 (un aumento del 7 por ciento).

Medidas para estimular el empleo femenino

La Consejería de Empleo, Investigación y Universidades, a través del SEF, cuenta con diversas medidas para estimular la creación de empleo femenino, como por ejemplo las ayudas económicas de mayor cuantía para mujeres en paro que se establezcan como autónomas. Dichas subvenciones oscilan entre los 3.000 y los 8.000 euros para los hombres, mientras que en el caso de las mujeres se mueven entre los 3.500 y los 9.000 euros.

Otras medidas son las ayudas de 8.500 euros a las empresas que contraten de manera indefinida a mujeres desempleadas y madres de niños de hasta tres años; un apoyo económico para conciliación a aquellas mujeres de este mismo colectivo que realicen cursos del SEF para desempleados, o la participación prioritaria en programas de empleo público, como los que alternan la formación con la experiencia laboral remunerada.