Guardia Civil detiene a una pareja por explotar a inmigrantes en Totana

En el marco del ‘Plan contra la trata de seres humanos’, la Guardia Civil de la Región de Murcia ha llevado a cabo la operación ‘Preciquemao’ en Totana (Murcia), que ha resultado en la detención de un matrimonio como presuntos responsables de delitos contra los derechos de los trabajadores, relacionados con la trata de seres humanos con fines laborales.

La investigación, iniciada por especialistas en Policía Judicial de la Guardia Civil en febrero, se llevó a cabo después de descubrir que una persona estaba viviendo en condiciones precarias en una nave avícola en las afueras de Totana. La conexión eléctrica ilegal de la nave provocó un incendio en el edificio, y la víctima, que realizaba diversas tareas a cambio de alojamiento y comida, resultó gravemente herida al intentar sofocar el fuego desde el techo.

El matrimonio marroquí propietario de la nave llevó a la víctima a un centro sanitario para evitar ser relacionados con el incidente. Después de recibir atención médica durante varios meses en el hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia, la víctima fue dada de alta, pero los presuntos explotadores no le brindaron la debida atención. Debido a su situación de extrema vulnerabilidad por motivos de salud, económicos y sociales, la víctima fue alojada en un obrador de pan propiedad de los presuntos explotadores, que no ofrecía condiciones óptimas de recuperación debido a las altas temperaturas y los ruidos generados por la actividad.

La víctima denunció los abusos sufridos, lo que reveló que los sospechosos también tenían a otros cuatro hombres marroquíes en situación irregular trabajando en régimen de explotación laboral.

Los agentes de la Guardia Civil llevaron a cabo una serie de investigaciones para corroborar los hechos denunciados y descubrieron que el obrador de pan, ubicado en Totana, estaba en funcionamiento todos los días de la semana. El establecimiento se dedicaba principalmente a la elaboración de pan que se distribuía en tiendas especializadas en productos norteafricanos.

Se observó que la panadería no tenía atención al público y que las personas que accedían al lugar tomaban medidas para evitar ser detectadas. Además, el horno tenía una gran actividad, ya que recibía una gran cantidad de materiales para la elaboración de productos que luego se cargaban en furgonetas y se distribuían en tiendas de comestibles de la comarca del Guadalentín.

Una vez obtenidos los indicios necesarios y con la autorización judicial correspondiente, la Guardia Civil realizó la entrada y el registro del establecimiento clandestino, donde se identificó a dos trabajadores en situación irregular y se encontró documentación relevante para la investigación.

En otro inmueble vinculado a los sospechosos, se encontraron y se identificaron a otros dos hombres que presumiblemente también eran explotados en el mismo establecimiento.

Durante la operación, todas las víctimas denunciaron la situación de explotación que habían sufrido. Algunos de ellos relataron que habían trabajado durante años en situación irregular, sin permiso de trabajo, contrato ni seguridad social, realizando jornadas laborales de entre 14 y 16 horas diarias, sin descanso ni vacaciones, y recibiendo una remuneración mínima.

También declararon que no contaban con los requisitos profesionales y sanitarios para la producción de alimentos. Sin embargo, la investigación reveló que la panadería era un negocio próspero y que los empresarios llevaban un nivel de vida elevado.

La fase de la operación concluyó con la detención la semana pasada del matrimonio, presuntos responsables de explotación laboral en condiciones inhumanas, como autores de delitos contra los derechos de los trabajadores en el ámbito de la trata de seres humanos. Los detenidos, junto con los objetos incautados y las diligencias instruidas, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Totana (Murcia), que ha tomado medidas de seguridad contra ellos.