A sangre fría. Recordamos a Truman Capote

@ellorquino| Hace 31 años que falleció, tal día como hoy, el escritor americano Truman Capote. Nacido como Truman Streckfus Persons (el apellido Capote lo tomó de su padrastro), tuvo una infancia algo difícil, y empezó a escribir para alejarse de esos malos momentos. A los 17 años comenzó a trabajar en The New Yorker pero pronto tomaría su camino como autor, escribiendo varios relatos para revistas que le fueron otorgando fama.

En imagen: Truman Capote (1924-1984)

Entre sus novelas figuran dos esenciales para la historia de la literatura: Desayuno en Tiffany’s (1958) y A sangre fría (1966). La primera, más desenfadada, narra la vida de Holly Golightly, una vividora que subsiste manteniendo relaciones con hombres mayores y adinerados, y sin tener otra preocupación salvo esa. Fue adaptada al cine por Blake Edwards y protagonizada por Audrey Hepburn (Desayuno con diamantes, 1961).

Sin embargo, la obra que encumbraría a Capote, fue A sangre fría. Una novela que narra el asesinato real de una familia, los Clutter, a manos de dos inadaptados, Dick Hickock y Perry Smith, en 1959. Destaca la doble polaridad de la novela desde el principio. Por una parte está la familia Clutter, que son un ejemplo de la perfecta familia americana; adinerados, amables, queridos por todos… tan auténticamente estadounidenses y perfectos que parecen falsos.

Y por otro lado está la funesta imagen de Dick y Perry, los dos asesinos, que son la imagen contraria de los Estados Unidos de 1950 y 1960, una exageración del rebelde que popularizó James Dean en Rebelde sin causa. El autor viajó al pequeño pueblo de Holcomb, en Kansas, para entrevistarse con los vecinos de los Clutter e investigar para la creación de su novela. Le acompañó la escritora americana, y amiga de la infancia, Harper Lee (Matar a un ruiseñor). Pero Capote fue más allá y decidió entrevistarse con los dos asesinos, acercándose tanto a ellos que estableció amistad con Perry Smith, llegando incluso a decirse que mantuvieron una relación sentimental.

Todo este proceso se llevó al cine en la película Capote (2005), protagonizada por el desaparecido Philip Seymour Hoffman (que ganó un Oscar por interpretar al escritor). Se trató de un espantoso crimen que aterró a una comunidad, y la novela se encarga de narrar todos los acontecimientos relacionados directamente con éste, así como la posterior captura de los culpables, su condena a muerte y sus vivencias en prisión mientras que esperan su hora. Una lectura turbadora y tan profunda que te hará dudar de si es realidad o ficción.

Redacción: Fernando Cabrera. Periódico El Lorquino.