La concejala de esta formación, Gloria Martín, exige saber cómo se han invertido los 26 millones de euros que el Gobierno central ha destinado a la reindustrialización de Lorca tras los terremotos de 2011 a través del Plan Reindus.

También pide la creación de una malla de polígonos en diputaciones que permita caminar hacia un modelo de industria de transformación que cree y redistribuya riqueza, genere puestos de trabajo y fije la población en el medio rural. 

07.03.17. La concejala de Izquierda Unida-Verdes Lorca, Gloria Martín, ha pedido hoy al equipo de Gobierno municipal que lleve a cabo un estudio pormenorizado de la situación actual de la industria local con el fin de poner en marcha un modelo de gestión eficaz que promocione y dinamice la inversión en actividades acordes con las tendencias tecnológicas de futuro. La edil ha lamentado que, según datos del panel empresarial del INFO, solo el 7,5% de las empresas ubicadas en Lorca sean de base tecnológica frente al 11,5% de la media regional.

Martín ha explicado también que Lorca es la tercera ciudad más importante de la comunidad autónoma y, sin embargo, solo alberga cinco de las cien empresas principales de la Región frente a las 31 que radican en el municipio de Murcia, las 14 que lo hacen en Cartagena, o las 12 en Molina de Segura.

En su análisis, la concejala de IU-Verdes ha señalado que la estructura sectorial de la contratación en Lorca muestra cómo el sector agrario se sitúa a la cabeza de los contratos practicados, con un 70,8% del total. El de servicios absorbe otro 23,7%, mientras que la industria ha mermado notablemente su aportación en la última década quedando, en la actualidad, reducida a un 3,2%. Sectores como el textil, el curtido o la alfarería, motores de la economía lorquina durante el final del siglo XX, son hoy prácticamente reminiscentes.

Su condición de municipio eminentemente agrícola determina también una mala calidad en el empleo, con bajos salarios y alta estacionalidad y temporalidad. En este último caso, en Lorca los contratos temporales suponen el 95,33% del total. Una cifra por encima de las registradas a nivel nacional (91,93%) y regional (93,65%). «Relegarnos a ser un municipio principalmente generador de materias primas, con poco valor agregado, nos condena al empobrecimiento», dijo Martín para quien Lorca «debería ser capaz de promover una industria transformadora de alimentos que la sitúen en la cabeza del sector en la Región de Murcia».

Otro dato especialmente relevante es el hecho de que la afiliación de trabajadores a la Seguridad Social haya caído en picado en los últimos años, concretamente en 5.762 afiliados en la última década.

Todo ello revela un modelo económico desfasado y decadente que condena al municipio a altos niveles de paro y precariedad laboral y cercena sus expectativas de futuro. Demuestra también, según Martín, la “incapacidad” de los gobernantes locales para estimular los sectores productivos a pesar de la inversión de 26 millones de euros del Gobierno Central para impulsar la reindustrialización de Lorca tras los terremotos de 2011 a través del Plan Reindus. En ese sentido, Martín solicitará información al Alcalde, Francisco Jódar, acerca de la repercusión de esa línea específica en la inversión en infraestructuras fabriles, en el fomento de suelo industrial y en la creación de empleo en el municipio. “Se trata de una importante cantidad de dinero público y queremos saber cómo se ha empleado y cuáles han sido los resultados”, dijo.

Al respecto, la concejala de IU-Verdes ha lamentado el “abandono” del suelo industrial de las diputaciones lorquinas “que carecen de infraestructuras, servicios y dotaciones necesarias”.

Por ello, ha exigido al equipo de Gobierno municipal del PP que aborde el análisis y diagnóstico de la situación de todas las áreas industriales de Lorca, incluidas las de Almendricos, La Paca, Zarzilla de Ramos y Coy, con el fin de crear una malla de polígonos en estas diputaciones que, conforme a lo establecido en el Plan General, evite la dispersión de instalaciones en zonas agrícolas y de regadío, y permita caminar hacia un modelo de industria de transformación que cree y redistribuya riqueza, genere puestos de trabajo y fije la población en el medio rural.

Por último, también ha señalado la necesidad de  regenerar los polígonos industriales ya existentes, optimizando el uso de suelo, los recursos y las infraestructuras de transporte, para que se conviertan en lugares atractivos para la actividad económica y la inversión.