Economía
Se triplica el número de ‘ultra ricos’ en España
Según datos de la Agencia Tributaria Española, cada año son más los contribuyentes cuyo patrimonio supera los 30 millones de euros.
El número de contribuyentes españoles que declararon patrimonios de más de 30 millones de euros en el año 2016 es tres veces mayor que el registrado diez años antes, en el ejercicio de 2006.
En ese lapso temporal, los ‘ultra millonarios’ pasaron de ser 200 a sumar un total de 579, tal como señalan los últimos datos sobre la recaudación del Impuesto de Patrimonio publicados por la Agencia Tributaria. El incremento de este tipo de contribuyentes registrado en 2016 con respecto al año anterior se situó en un 5,4%, ya que de un año para otro la cifra aumentó en 30 declarantes.
Desde 2011, el número de ‘ultra ricos’ en España ha aumentado invariablemente: 352 en 2011, 443 en 2012, 471 en 2013, 508 en 2014 y 549 de 2015, hasta llegar hasta los mencionados 579 en 2016.
«El crecimiento no es inclusivo»
Comentamos estos datos con el Secretario General del Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (GESTHA), Jose María Mollinedo, a quien hemos preguntado si esta cifra creciente de ‘ultra millonarios’ podría estar indicando un aumento de la desigualdad o puede interpretarse como mero síntoma de la buena salud de la economía en España.
«La estadística no es un índice de desigualdad en sí mismo –explica Mollinedo–; lo que sí es cierto es que el índice de Gini [el parámetro que emplea la agencia Eurostat para determinar el grado de desigualdad en las economías de la eurozona] muestra que España es uno de los países más desiguales del continente, y esta desigualdad aumenta».
Mollinedo indica que «los beneficios empresariales están creciendo pero la participación de la renta de trabajo en el PIB ha disminuido en estos años de recuperación económica». El técnico explica asimismo que la expansión económica «no llega con la misma intensidad a las rentas del trabajo», y concluye que «el crecimiento no es inclusivo».
Para ilustrar esta circunstancia, Mollinedo señala que «las ventas totales de las grandes empresas, deflactadas y corregidas de variaciones estacionales y de calendario, crecieron en promedio hasta junio de 2018 un 3,3%, respecto al mismo periodo del año anterior», y destaca que «por el contrario, el rendimiento del trabajo bruto medio registró una tasa del 0,8%, tambien hasta junio de 2018″.
Una cifra exigua
En el caso concreto de los llamados ‘ultra ricos’, según Mollinedo, el aumento de su patrimonio se debe fundamentalmente a dos factores principales: a «la valoración de las acciones de las sociedades que poseen», que ejercen «un impacto indudable en la valoración de su patrimonio», y por otra parte a «la recuperación del valor de sus bienes inmuebles«.
La tributación conjunta de estos 579 ‘ultra millonarios’ a las arcas del Estado se podría cifrar en unos 100 millones de euros, según los cálculos de este técnico de Hacienda, de los aproximadamente 1.049 millones totales que el Impuesto de Patrimonio recauda en todo el país. Una proporción «bastante exigua», en opinión de Mollinedo.
Más allá de lo grande o pequeña que sea la contribución de estas 579 personas al erario público, el Secretario General de GESTHA considera que el problema radica en los grandes beneficios fiscales que existen en Madrid para el Impuesto de Patrimonio, «que, al estar bonificado al 100% en esa Comunidad Autónoma, hace que no se exija tributación a estas personas y se dejen de recaudar 815 millones de euros«. Hay que tener en cuenta que en Madrid se concentran gran parte de los consejos de administración de las mayores empresas del país, que se acogen a este régimen fiscal bonificado.
«Hay una diferencia importante entre ingresar para el conjunto del Estado 1.854 millones de euros o ingresar solo los 1.039 que se recaudan actualmente», apunta Mollinedo.
El técnico considera además que es necesaria una mayor presión fiscal sobre las grandes rentas y patrimonios, y recuerda que «el Fondo Monetario Internacional (FMI) también considera que en España hay margen para aumentar la tributación de las personas con grandes fortunas».
David Romero
