Educación
El colegio Andrés García Soler de Lorca visita Konya (Turquía) para intercambiar buenas prácticas sobre alumnos inmigrantes
Redacción: Ana Belén Miñarro Millán, para Periódico El Lorquino.
El colegio Andrés García Soler de Lorca ha comenzado su andadura en su segundo proyecto Erasmus + con una movilidad a la ciudad turca de Konya, en el marco de un proyecto con un título muy sugerente; We can achieve it; un ambicioso proyecto a nivel europeo que persigue el sueño la plena integración y cooperación entre todos los niños, sean cuales sean su raza, religión, nacionalidad o cultura. Y en esta noble misión se han embarcado cuatro maestros del colegio lorquino para, junto con otros docentes de Grecia, Italia, Rumanía y Turquía, intercambiar buenas prácticas sobre integración de niños desplazados de sus países de origen, tales como inmigrantes o refugiados de países en guerra.
“En Turquía hay muchos niños refugiados procedentes de Siria, y también en Grecia. ¡1 de cada 10 niños de las escuelas de Turquía son refugiados sirios! Allí tuvimos un seminario muy interesante con una asociación que se dedica a ayudar a los refugiados en todos los ámbitos; problemas de desconocimiento del idioma, problemas psicológicos, de desarraigo…” nos explica Elisa, la directora del García Soler.
“Los maestros de los distintos países que coincidimos allí explicamos la metodología que siguen nuestras escuelas para integrar y educar a los niños inmigrantes y refugiados”. Y puntualiza: “ No podemos confundir a los inmigrantes que vienen de sus países con un trabajo, con los refugiados que vienen sin nada, huyendo de una situación de guerra”. “Nosotros sólo tenemos inmigrantes en nuestro colegio de Lorca. Allí, todos los presentes pusimos en común las ayudas ofrecemos a estos alumnos, y hablamos de las becas para libros y para el comedor, de las ayudas que ofrecen los gobiernos de nuestros respectivos países… Los turcos nos contaron las muchas atenciones que ofrecen a los niños refugiados. Fue muy bonito”.
En la ciudad de Konya, los docentes lorquinos se contagiaron de las enseñanzas de Mevlana, poeta y filósofo místico que nació hace ocho siglos en Afganistán, y que está muy presente en la ciudad de Konya.
“Este profeta, conocido como Rumi, murió aquí en Konya, así que la ciudad todos los años celebra una serie de actos en su honor. Fuimos testigos de un rito que siguen millones de personas, y que fundó él. Rumi creía en las propiedades curativas del arte y de la danza, y cómo pueden hacer desprenderse del ego. Fue impresionante, sobre todo por el silencio y la devoción de la gente” – rememora Elisa, emocionada.-“Este místico, que tiene seguidores de todas las religiones, preconizaba el amor y la tolerancia, y esos valores impregnan el espíritu de las escuelas de esta ciudad; es impactante el ambiente de hospitalidad , generosidad y convivencia entre los colegios”.
Pero, más allá de la parte mística, nuestros maestros se mostraron sorprendidos por el alto nivel de las escuelas que visitaron en el país. “ Las instalaciones y el mobiliario de los centros eran muy muy buenos, al igual que la metodología de enseñanza, que era muy manipulativa; por ejemplo, las Matemáticas se enseñaban con figuras de fieltro. Además les dan una gran importancia a las nuevas tecnologías; se trabaja la realidad aumentada, la robótica, la programación…”
Así el equipo de maestros del C.E.I.P Andrés García Soler ha vuelto a nuestra ciudad cargado de nuevas ideas para llevar a cabo con todos los alumnos inmigrantes que estudian en el centro educativo lorquino.
“Nos hemos propuesto, por ejemplo, tener más contacto con este tipo de estudiantes, hacer más reuniones con las familias de estos alumnos para conocerlos más a fondo, y hacer actividades de integración de tipo lúdico pero a nivel de centro, para que nos enriquezcan a todos, aunque a nivel de aula los maestros de nuestra escuela siempre han hecho maravillas con este tipo de alumnado; hemos pensado en organizar un desayuno saludable intercultural, o en competiciones de juegos autóctonos de sus respectivos países, para que así nosotros también los podamos conocer”. “Se trata de poner un poco en valor de dónde vienen, para que se sientan valorados y también para que nosotros podamos enriquecernos con sus costumbres”. Elisa se lamenta de que “nos estamos perdiendo la cultura de esos niños ; por ejemplo,ahora llega la Navidad y no sabemos cómo la celebran en sus países de origen”.
Pero esta aventura intercultural no ha hecho más que empezar para los maestros del C.E.I.P Andrés García Soler involucrados en este proyecto; esto es sólo la primera movilidad y la próxima parada será en Rumanía, donde los maestros de Lorca intercambiarán ideas con los demás participantes sobre cómo integrar a niños inmigrantes mediante actividades relacionadas con el deporte, la narración y la Lengua y la Literatura. Además, todos los países participantes están preparando un libro que reúne todos los juegos tradicionales y hobbies infantiles típicos de todos ellos.
“Aquí en Turquía les hemos enseñado el juego de la rayuela y el cultivo del huerto que hacemos en nuestro colegio y en las siguientes movilidades llevaremos el juego de las chapas y los cromos. –explica- “El director de Grecia va a recopilar todos los juegos de los distintos países en un libro, va a hacer copias y, con el dinero del proyecto Erasmus, vamos a regalar una a cada alumno inmigrante o refugiado que tengamos en nuestros centros.”