Conecta con nosotros
Redacción: Daniel Cáceres para Periódico El Lorquino

Águilas

El viaje de Cope

Daniel Cáceres, para Periódico El Lorquino.




“El grupo ecologista ANSE compra Cabo Cope”.

Así de rotunda y contundente, saltaba como nunca antes en nuestra Región una noticia tan positiva aparentemente, pero que a su vez, ha creado la mayor de las controversias entre ecologismo y conservacionismo.

Por un lado nos encontramos con la privatización de un espacio público y protegido, lo que, a ojos vista, sería una aberración en un estado de derecho. Por el otro, atisbamos el hambre feroz de empresas como Iberdrola Inmobiliaria intentando hacer urbanizable hasta el mismo cielo.

Ante esta disyuntiva de conocer hasta donde llegan los límites y de establecer donde empieza y acaba el bien y el mal se encuentra el ciudadano de a pie, el cual se alegra de la protección de un espacio como es el de Cabo de Cope, pero que no entiende como con la privatización se puede proteger lo público, lo que alguno podría llegar a calificar de “encarcelar al inocente”.

Un servidor entiende, después de haber visitado varios ejemplos, que también se puede crear un negocio de la naturaleza, convirtiendo un peñasco transitado habitualmente por senderistas, en una atracción ecológico-turistica, lo cual todos sabemos que si sale mal solo quedarán los restos de casetas de madera y si sale bien imposibilitará el acceso libre a una zona que anteriormente era totalmente pública y gratuita. Eso sería algo como “te compro el caballo para que no lo maten, pero me lo llevo al hipódromo para ganar dinero”.
Ante todas estas cuestiones y muchas más que se pueden sacar sobre este extraordinario e increíble suceso, el cual lleva fraguándose mas de dos años y que, de repente, se proclama a bombo y platillo en plena cuarentena, ya conoceremos mas adelante (o, no) si nos cuesta el pan al contribuyente, porque no es de extrañar que a mas de uno no le haya gustado la jugada y le pidan a la ministra para la transición ecológica explicaciones. Y al final, entre el tuyo y mío, hubiera que devolver el caballo a su antiguo dueño y en compensación dejarle una molienda de trigo al perjudicado.

Creo que hubiera sido mas barato y beneficioso para la Marina de Cope haber comprado una finca urbanizable en mitad del parque para romper así directamente el potencial de crear un macro-complejo turístico, pero también es verdad que eso no es tan espectacular y ecológico-rentable a posteriori.

Lo que si esta claro es que el pobre Cabo esta muy mareado y no precisamente por las olas que azotan su espalda, sino por el vaivén de novias que ha tenido, empezando por Caja Madrid, que fue su primera novia. Sus amigos le decían que no se preocupara porque era pública y le iba a tratar muy bien, pero el pobre tuvo un desengaño amoroso y en una fiesta en Calabardina, sin quererlo ni beberlo, su “amigo” Pepe le presento a Bankia. Según el tal Pepe, esta era una muy buena chica que venía de una de las mejores universidades privadas, y, como si de un matrimonio concertado se tratara, el Pepe los junto si o si.

Pero un día, en mitad de su matrimonio, Cabo se despertó sorprendido al ver en el horizonte a Pepe rescatando en mitad del mar a su esposa, la cual navegaba a la deriva en un barco de papel. De nuevo, sin enterarse de nada, Cabo seguía estando con la misma novia pero con un título menos.

Pepe le confesó que no, que era broma, que en realidad el título de la Juan Carlos I se lo regalaron, pero que el de la universidad de La Merced si que lo tenía, con lo que Cabo se quedó más tranquilo.

Y ahora, que ya estaba medio relajado, tomando el sol en verano y pescando en invierno, sin meterse con nadie, su mujer se ha marchado de casa y lo han metido a la fuerza en la residencia privada ANSE para que pase “tranquilamente” su jubilación.




Redacción de Periódico EL LORQUINO Noticias.

Más de Águilas

To Top