Cruce de acusaciones entre PSOE y PP por el estado de la calle Alta en Lorca

El estado de abandono de la calle Alta, en pleno centro histórico de Lorca, ha desatado un nuevo enfrentamiento político entre PSOE y PP. Mientras los socialistas denuncian el “gravísimo deterioro” de esta vía y exigen una intervención urgente, el equipo de gobierno defiende las actuaciones realizadas en la zona y acusa a la oposición de oportunismo.

El concejal socialista José Ángel Ponce se ha hecho eco de las quejas vecinales, asegurando que “los vecinos están hartos” por las caídas provocadas por el mal estado del pavimento, la falta de accesibilidad, la acumulación de suciedad y una “alarmante plaga de ratas”. Ponce considera que “la calle necesita una solución definitiva” y critica que, pese a la inauguración hace un año del Mirador del Cabezo de las Palas al final de esta vía, “el entorno ha sido completamente olvidado”.

“Parece mentira que se inaugurara un mirador para dinamizar la zona, pero desde entonces Fulgencio Gil aplica el ‘si te he visto, no me acuerdo’. La calle Alta está en un estado lamentable, insalubre y abandonada”, ha afirmado el edil, quien también ha instado al Ayuntamiento a valorar la conversión de algunos solares abandonados en espacios verdes para los vecinos.

Por su parte, el equipo de gobierno local ha respondido asegurando que la calle Alta y su entorno “viven un resurgir” gracias a la puesta en marcha del mirador, que ha supuesto —según el consistorio— una profunda transformación de una zona deprimida, con más de 500 metros cuadrados renaturalizados, muros de contención, accesos controlados y vistas panorámicas sobre el casco antiguo.

Desde el gobierno local también recuerdan que fue el Partido Popular, hace dos décadas, quien impulsó el Plan Integral de los Barrios Altos (PIBAL), y consideran “significativo” que el PSOE y el edil Ponce “descubran ahora la calle Alta y se muestren preocupados por la accesibilidad”.

Aun así, el consistorio ha asegurado que toma nota de las propuestas socialistas y que serán estudiadas. Mientras tanto, los vecinos siguen esperando soluciones concretas a una situación que denuncian como insostenible.