El PP reclama más medios para el cuartel de la Guardia Civil de Zarcilla de Ramos, que seguirá operativo

El futuro del cuartel de la Guardia Civil de Zarcilla de Ramos se ha convertido en el nuevo foco de confrontación política en Lorca. Mientras el delegado del Gobierno en la Región de Murcia, Francisco Lucas, ha anunciado que el acuartelamiento seguirá operativo tras reunirse con la directora general de la Guardia Civil, Mercedes González, el Partido Popular ha lanzado una ofensiva institucional en todos los niveles —Ayuntamiento, Asamblea Regional, Congreso y Senado— para garantizar no sólo su continuidad, sino su refuerzo permanente.

El Gobierno central asegura la continuidad del cuartel

Según informó el propio Francisco Lucas, la reunión mantenida en Madrid con la dirección de la Guardia Civil concluyó con el compromiso de mantener en servicio el cuartel de Zarcilla de Ramos, cuya clausura se había barajado en el marco de una reorganización interna del cuerpo destinada a optimizar recursos.

Lucas trasladó a González las particularidades del municipio de Lorca, el más extenso del país, con numerosas pedanías rurales que dependen de la presencia cercana de la Guardia Civil. Subrayó que el puesto de Zarcilla de Ramos cumple una función esencial de seguridad y proximidad en zonas como Zarzadilla de Totana, La Paca, Coy, Avilés o Doña Inés, motivo por el cual solicitó expresamente su continuidad.

“Desde el primer momento he trabajado con rigor y responsabilidad para evitar el cierre del cuartel”, afirmó Lucas, quien celebró que la decisión final “trae buenas noticias para los vecinos y vecinas de Lorca”.

El delegado recordó además que en los últimos años el Gobierno de España ha reforzado la plantilla de la Guardia Civil en la Región de Murcia, con la incorporación de más de 350 agentes desde 2018, alcanzando una cifra récord de 2.200 efectivos. Solo en la Compañía de Lorca, 45 nuevos guardias civiles se sumaron recientemente, lo que permitirá duplicar las patrullas mensuales.

El PP desconfía del anuncio y prepara mociones en todas las instituciones

Pese a este compromiso, el Partido Popular considera que el anuncio del Gobierno central llega “tarde y con tintes oportunistas”, y ha decidido mantener su campaña institucional para “salvar y reforzar” el cuartel de Zarcilla de Ramos.

El presidente del PP en Lorca, Fulgencio Gil, junto a la senadora Antonia López y la diputada regional María del Carmen Ruiz, reiteró su apoyo “firme y sin fisuras” a los vecinos de las pedanías altas.

“Su continuidad es un hecho esencial e irrenunciable. Este cuartel ha sido un pilar clave de seguridad y no sólo exigimos que se mantenga, sino que se refuerce y se convierta en un puesto operativo permanente, abierto las 24 horas y con mayor dotación de agentes. Aquí no hay margen para recortes”, aseguró Gil.

La diputada María del Carmen Ruiz acusó al Gobierno central de “engañar a los lorquinos”, recordando que en julio la entonces delegada del Gobierno negó que se contemplara el cierre. “Este cambio de versión demuestra que su palabra no vale nada. No lo vamos a permitir”, afirmó.

Por su parte, la senadora Antonia López calificó la situación como “una cuestión de justicia territorial”, y anunció que el PP llevará la defensa del cuartel “hasta el final” en el Congreso y el Senado.

Un símbolo de seguridad para las pedanías altas

El cuartel de Zarcilla de Ramos, construido hace más de 90 años, es una referencia de seguridad ciudadana en el norte de Lorca. Presta servicio a varios núcleos rurales y constituye, según coinciden ambas formaciones, un elemento clave de cohesión y presencia del Estado en las zonas más despobladas del municipio.

Mientras el PSOE celebra que la negociación impulsada por Francisco Lucas haya garantizado la continuidad del puesto, el PP mantiene que la situación “sigue siendo incierta” y exige que el compromiso se traduzca en hechos concretos.

“Nos están preparando el cuerpo para cerrarlo”, advirtió Fulgencio Gil, acusando al Ejecutivo de “manipular y maquillar sus intenciones”.

Ambos partidos coinciden, sin embargo, en un punto: la seguridad en las pedanías no puede ser objeto de recortes. Mientras el Gobierno central defiende su inversión en efectivos, el PP pide pasar de las palabras a los hechos y convertir el cuartel de Zarcilla de Ramos en una base reforzada, permanente y abierta las 24 horas del día.