Viajes
Verano en la península, para todos los públicos
El verano llama a nuestras puertas, estamos a un paso de irnos de vacaciones a esos destinos que ya hemos elegido y a los que estamos deseando de llegar, ponernos cómodos y comenzar a disfrutar de todo lo que nos ofrezca. Cuatro son los destinos dentro de la península; el de costa, el de montaña, el de ciudad y el denominado sin destino, es decir, el de carretera y manta y que el azar decida.
La piel de toro, que el geógrafo griego Estrabón utilizara como analogía para referirse a la península ibérica, tiene todo lo que se necesita para cubrir cualquier gusto vacacional. Para los amantes de la costa, de la sierra, la montaña, pueblos con encanto o ciudades con historia, cosmopolitas y modernas, la mejor gastronomía posible, y con la mezcla perfecta de sangre latina y cultura basada en la educación y el respeto de sus gentes.
Vacaciones de costa
Al elegir un destino vacacional de playa, la mayoría de nosotros espera encontrar algún tipo de actividad que realizar en el sitio, todos queremos aprovechar nuestras vacaciones al máximo, hacer algo más allá de tumbarnos bajo la sombrilla y nadar. Es por esto que cada vez con mayor frecuencia se establecen negocios en las costas que ofrecen actividades deportivas o de aventura.
De este modo, si vas a visitar las mejores playas de Asturias, puedes alquilar una moto de agua en Aqua Moto Gijón, especializados en el alquiler de motos en Asturias, una forma altamente original y muy divertida de conocer esta costa. Si quieres tener más información sobre esta actividad y cómo realizarla al mejor precio, solo tienes que hacer clic sobre el enlace que acabamos de dejar referenciado en este párrafo.
Pero no es la única actividad de acción que puedes realizar teniendo como reconfortante protección las olas del mar, desde las más atrevidas como el surf, el windsurf, el kite surf, hasta las más relajadas, como el submarinismo o el snorkel para descubrir el fondo marino, o también el paseo relajado sobre un Kayak o un Paddle surf.
Descubrir una ciudad
Aunque la playa es el destino con mayor afluencia en los veranos, es en estos meses cuando mejor se ven las ciudades, sobre todo las capitales europeas, pues buena parte de su población habitual también se va de vacaciones, quedando sus calles más vacías, con lo que nos encontraremos con menos tráfico, menos colas para ver los museos y para cualquier espectáculo. Además, los ayuntamientos suelen programar más actividades lúdicas y eventos culturales, con lo que tendremos más opciones de entretenimiento.
Si todavía no hemos hecho turismo en Lisboa, la capital portuguesa, quizás sea este 2019 el mejor momento para viajar a Lisboa, y disfrutar de todo lo que tiene que ofrecerte esta ciudad que no es poco; desde recorrer los mejores miradores del mundo hasta sus calles en el emblemático Tranvía 28. En la dirección web https://www.viajaralisboa.com/tranvia-28/ vas a encontrar toda la información que necesitas sobre esta ineludible atracción turística lisboeta. También debemos aprovechar la oportunidad de visitar el barrio de Alfama, el Monasterio de los Jerónimos, la Catedral de Lisboa, el barrio bohemio del Chiado y el Convento do Carmo, la Torre de Bélem, la Plaza del Comercio o el Castillo de San Jorge, entre otros.
Cuando la carretera es el destino
Para muchos, el viaje en sí es el verdadero destino, la despreocupación de no tener objetivos que cumplir en vacaciones, hoteles que pagar, ni tiempos de permanencia es lo que los hace descansar. La aventura diaria de dormir cada noche en un lugar distinto, acceder a lugares insospechados y pasar el día y la noche allí, donde más les place es el único modo de concebir unas auténticas vacaciones.
La única forma de hacer este tipo de viajes en familia es con una caravana, un hotel que te ofrece las mejores vistas del planeta, siempre distintas, siempre hermosas, la única forma de sentirte completamente libre, tanto para elegir destino como para cambiarlo, como para quedarte en un lugar o seguir la ruta. Siempre será lo que tú decidas, puedes improvisar a medio camino o dedicar los días que quieras a un paraje de especial belleza, los gastos son menores que las habitaciones de hotel, te sentirás siempre en casa…
Lo único que debemos hacer es conocer los lugares que están habilitados para que podamos descansar seguros o para reabastecernos, así como los talleres especializados en caravanas que se puedan localizar en nuestro camino. Así si te encuentras de viajes por el Somontano de Barbastro y tienes una incidencia y necesitas reparar tu autocaravana, tendremos la enorme fortuna de contar con el taller de autocaravanas en Barbastro Talleres la Piedra, más de 2.000 metros cuadrados adaptados para dar solución rápida y económica a cualquier fallo que pueda tener tu casa ambulante.
La gastronomía nacional, un referente mundial
Mentiríamos si no coincidimos con aquellos turistas internacionales que se declaran amantes incondicionales de la gastronomía peninsular. La península ibérica destaca sobre el resto de posibles destinos turísticos por la calidad de sus productos de cocina y la gama de sabores exquisitos y particulares.
Desde Portugal con su especial dedicación, siempre con delicadeza hacia pescados como el bacalao, con una receta para cada día del año, hasta cada una de las ciudades españolas, de las que caben destacar los clásicos tortilla de patatas, el jamón y el aceite de oliva como triada nacional, y el gazpacho andaluz, la paella valenciana, las migas extremeñas, el cocido madrileño, el pulpo a la gallega, la fabada asturiana, el cordero asado vallisoletano o el memorable chuletón de Ávila.
Y cada región, ciudad o población tiene su mejor restaurante, asador, bar o terraza donde se preparan los mejores platos. Si quieres saber, por ejemplo, donde comer en avila ese chuletón que tanta fama le ha dado a la gastronomía de esta ciudad, lo mejor es ir directamente a la Guía de Ávila, un sitio online donde recoger toda la información de Ávila, y sobre todo donde se come realmente bien platos como el mencionado chuletón, las patatas revolconas, una buena sopa castellana, unos judiones del Barco de Ávila, un cocido Morageño o la Monda de Mombeltrán para terminar con unas deliciosas Yemas de Santa Teresa que nos dejen un dulce sabor en el paladar.